La pérdida de una mascota puede ser un momento muy difícil para los niños, ya que a menudo es su primera experiencia con la muerte y puede generar una profunda tristeza y confusión. La muerte de una mascota puede ser una oportunidad para enseñar a los niños sobre el duelo y la importancia de honrar y recordar a quienes han amado.
Explícales de manera honesta y comprensible lo que ha sucedido. Evita eufemismos como “se fue de vacaciones” o “se durmió”. Usa palabras sencillas y claras para describir la situación, como “nuestra mascota ha fallecido, lo que significa que ya no está con nosotros”.
Es normal que los niños sientan tristeza, enojo, confusión o culpa cuando pierden a una mascota. Valida sus emociones y anímales a expresarlas. Está presente para abrazarlos y escucharlos. Algunos niños pueden necesitar más tiempo para procesar la pérdida, sé paciente y comprensivo, y ofréceles un espacio donde puedan hablar sobre sus sentimientos y recordando los cuidados y amor especial que siempre se le dió.
Puedes organizar un pequeño ritual de despedida en honor a la mascota. Esto ayudará a los niños a sentir que están dando un adiós significativo. Lee libros sobre la despedida o cuéntales la leyeda del arcoriris.
Dependiendo de la edad del niño, habla sobre el ciclo natural de la vida y la muerte. Explícales que todas las criaturas, incluyendo a las personas, eventualmente mueren.
¿Cuánto tiempo es el prudente para llevar una nueva mascota a casa?
El momento adecuado es una decisión individual y depende de las necesidades emocionales de la familia. No existe un período de espera universalmente apropiado, ya que algunas personas pueden sentirse listas después de unos meses, mientras que otras pueden necesitar más tiempo para sanar y reflexionar sobre lo que desean en una nueva mascota.
Si la familia decide adoptar una nueva mascota en el futuro, asegúrate de que los niños entiendan que esta nueva mascota no reemplazará a la anterior, sino que será una adición a la familia
