Bonsai nació con un defecto congénito conocido como Síndrome de regresión Caudal, esto quiere decir que solo tiene la mitad de la columna y sus patitas delantera más no las traseras.
Esta condición es rara que la llegue a padecer un perro ya que suele ser propia del ser humano, los veterinarios aún buscan una explicación para la condición de Bonsai que lucha cada día para sobrevivir ya que sus órganos están en peligro por la presión que hay dentro de ellos.
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La Asociación Friends of Emma ubicado en Arkansas ,EEUU están buscando fondos para apoyar a Bonsai y los posibles tratamientos para su condición ya que es el único perro en el mundo que padece este síndrome y no hay mucha información sobre procedimientos médicos veterinarios.
Elizabeth Hart una de las colaboradoras del santuario que apoya a Bonsai dijo: “Bonsai tiene un carácter especial y sólo espero que al difundir su historia se pueda tomar conciencia que los seres nacidos diferentes tanto animales como humanos, pueden hacer la diferencia en la vida y corazones de los demás”.
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Bonsai proviene de un criadero de perros de la raza Bulldog Inglés el 27 de abril de 2,015 donde lo tenían listo para eutanasia hasta que la asociación intervino y lo pidió para cuidarlo y darle todo el amor que se merece durante el tiempo que este con vida.
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Fuente: seamosmasanimales.com