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Historia de adopción: Sonrisa

Yo voy al colegio y tengo un amigo que vive en mi colonia, de vez en cuando nos juntábamos a jugar y la primera vez que fui a su casa vi que tenia dos perritos, allí estaba Sonrisa.

Le pregunté que tenía y el me dijo que no podía caminar. Pasaron alrededor de 3 meses y volví a ir a su casa y llevé a wisky. La mamá me dijo “yo también tengo una, pero no puede caminar así que esta semana la voy a dormir” y pues me dio lastima porque solo tenia 3 años.
 

historia sonrisa

Entonces, yo le dije a mi amigo que porque no me la daban y el me dijo que ella en la noche lloraba de dolor. Lo pensé, y al siguiente día le dije no me importaba, que la iba a cuidar y no iba a dejar que la durmieran, que tal vez se podía curar y poder vivir con el dolor. El lo habló con su mama y después de días me dijo que si me la iba a dar.

El día que me la dio la lleve al veterinario y vi que le funcionaban las patas de adelante, excelente, solo las de atrás le fallaban un poco pero intentaba. La recibí y estaba feliz, movía la cola con felicidad e intentaba caminar le costaba pero podía.

La veterinaria me dijo que ella podía vivir y para el dolor se le podía dar medicamentos, lo que importaba es que ella no sufriera, queríamos darle calidad de vida, que viviera feliz aunque le costara caminar. La veterinaria le mando medicamentos y ejercicios. Le di su medicina y le hice sus ejercicios en las tardes salía a jugar con todos los chihuahuas.

Habían momentos donde parecía que no tuviera nada, caminaba normal, se nota que cuando uno quiere algo lucha por lo que quiere hasta lograrlo, nunca se tiene que perder la fuerza, la motivación a hacer las cosas. Nada es imposible si luchamos y nos esforzamos.

Para mi es un gran ejemplo Sonrisa porque luchó para no darse por vencida y seguir adelante, nunca se rindió y para mi nada me hace mas feliz que poder ayudar con eso, darle hogar a un perro y mas si le salvo la vida. Sonrisa sin saberlo me dio el ejemplo de no rendirme nunca, por eso creo que ella es un ejemplo a seguir.

Cuando salgo a jugar con ella me mira con ojos que me dicen todo y dicen algo como: “tú me salvaste la vida, me has dado una mejor calidad de vida, lo que cualquier perro podría desear yo te ofrezco mi amor y mi lealtad para siempre te voy a apoyar con todo lo que hagas y nunca te voy a dejar te quiero”.

Historia proporcionada por Pablo Gonzalez

Publicado: 01/10/2013

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